Buscando un poco de distraccion (libre)

Estaba caminando por el bosque esperando a que mis pensamientos se despejaran un poco despues de tantos problemas que habia en Volterra

Caminaba... Distraida, por el bosque no sabia si aun seguia en el mismo bosque de Forks, enseguida comenze a sentir el efluvio de Sulpicia, no sabia que estaba aqui, fui rapido a encontrarme con ella, ___ Sulpicia, tambien viniste a Forks?, Es una sorpresa no me lo esperaba... ___ Observe la fria imagen de la esposa de la realeza por unos segundo... Era extraño que no estuviera con Aro.

Estaba tan distraida que no note el efluvio de Heidi, hasta que me saludo -Hola Heidi es una sorpresa encontrarte aqui- pese que estaba sola en este lugar -debo de confesarte que me alegra mucho verte aqui me haces sentir mas protegida- este era un lugar muy extraño para mi ya que mi esposo no me dejaba salir mucho -y tu que haces en este lugar linda?

Mire extrañada, pero la proteccion era mi trabajo, asi que lo haría encantada. ___ Bien Sulpicia, vine aqui por una mision que me otorgo mi señor aqui en Forks... Pero es un lugar solitario y apestoso. ____ El lugar parecía el mismo infierno, el olor era asqueroso, ___ Sulpicia, ¿que haces tu aqui?, no puedes estar sin protección, me parece tan extraño que Mi señor te haya dejado salir en estas sicurstancias, dime viniste por alguna encomienda? ___

En realidad mi curiosidad es la que me ha traido a este lugar, se que el olor es asqueroso pero queria conocer a los licantropos- nunca me habia acercado a ellos -aunque tambien seria bueno darle una visita a los cullen- sonrei con maldad

___ Pues coincido, contigo Sulpicia, Darle una visita a los cullen, no nos vendria para nada mal. ___ Le sonrrei. Ella sabia que yo haria cualquier cosa que me ordenara, ___ Usted digame cuando desearia ir, y yo la acompañare, si lo desea claro ___

Claro que si linda tu compañia me haria muy bien en este momento- la mire y pregunte -pero dime primero, has visto a alguno de esos licantropos por aqui??- sonrei con maldad -me gustaria conocer a alguno y probar sus abilidades-

Iba cargada con una bolsa de deporte, todo lo que llevaba de equipaje. Estaba buscando algun clan licántropo para poderme asentar allí, estaba perdida, no encontraba ningún camino ni nada por el estilo, moví las ramas de los arboles apartandolas. De repente vi a dos mujeres, que no me dieron gran confianza. Me cambie la mochila de hombro y me ajuste la gorra, mirándolas.

Me dirigía hacia casa de Quil, cuando de repente un extraño aroma me llegó a unos kilómetros.
Eché a correr en esa dirección y vi a dos vampiras rondando por el bosque. También vi a una chica observándolas entre los árboles. Me enervé de repente, porque la chica no era vampira y temía que la vieran.

Ey vosotras...¿no sois de por aquí no? ¿No sabéis que en la reserva no entran chupasangres? - les hablé muy borde -

De repente un olor terrible se acerco a nosotros asi que voltee, observe a dos chicas que nos miraba al parecer era lo que estaba buscando en este lugar -Ahora ya no estamos solas linda- le dije a Heidi con una sonrisa llena de maldad, mire a la chica que no fue muy amable y dije -Hola quien eres? al parecer tu no sabes con quien estas hablando verdad? no te preocupes somos amigas de los cullen tu debes saber quienes son ellos- sonrei, sabia que Edward se arrepentiria si algo me pasaba, automaticamente moriria toda su familia

Tú sí que no sabes con quién estás hablando sanguijuela. Los Cullen no son nuestros amigos...te informo que esto es territorio vetado para vosotros, sino consúltaselo a tu querido Edward...¿te suena el Pacto de límites entre licántropos y vampiros? - dije bruscamente -
Y miré a la chica que se asomaba entre los árboles, que las observaba con la misma mala leche que yo.
Por cierto soy Leah Clearwater...mucho gusto - dije irónica a las vampiras -

Me rei por lo que habia dicho la lobita -Al parecer tu amigo el novio de la hija de Edward no te ha hablado de nosotros, te suena el nombre de los Vuluris?- sonrei recordando la exprecion de aquel lobo cuando mi esposo estaba dispuesto a matar a la hija de Edward- Somos los vampiros mas peligrosos con los que te puedas enfrentar-

Sé perfectamente quién sois, y sé que también os habéis marchado con el rabo entre las piernas en la última batalla sino recuerdo mal...además ¿qué buscas en la reserva gran Vulturi? ¿no deberías estar en tu castillo? Contesta... - apremié a aquella vampira con violencia, comenzando los temblores en mi cuerpo -

Que podia saber un pequeño animal de las reglas vampiricas -Se que tu corta edad te hace suceptible a la comprencion del mundo y que no tienen el mismo poder que los verdaderos hijos de la luna, tu poco control para entrar en fase lo demuestra- recorde a los verdaderos licantropos, los que realmente eran verdaderos enemigos para nosotros -Y respecto a estar en el castillo, todos tememos derecho a un poco de divercion no crees?- sonrei con maldad

Para empezar no soy una hija de la luna, soy algo más allá de lo que tú puedas entender. Y me controlo perfectamente, pero los malos olores me suelen causar este tipo de reacción alérgica.... - reí irónica -
Y si por diversión entiendes morir entre las garras de un licántropo estás en el sitio adecuado...además no me has contestado Vulturi ¿qué buscáis en la reserva? - rugí temiendo que ya se hubiera alimentado de algún miembro de nuestra tribu -

Poco a poco el lugar empezó a ser invadido por una espesa niebla baja.

De repente me vi envuelta en una espesa niebla que me hizo concentrarme en cada uno de los movimientos de mi alrededor.
Mierda hay otro vampiro - pensé rechinando los dientes -
Sentí el efluvio de la otra chica y supe que era un licántropo también. Tendría apoyo, pese a no saber ni quién ni de dónde había salido esa nueva loba.

Muéstrate y deja de engañar con trucos baratos...- grité al causante de aquella confusión al tiempo que me mantenía alerta ante el más mínimo indicio de ataque, a punto de entrar en fase -

La niebla se concetró alrededor de las dos chicas de la reserva y sin tiempo a reaccion mi cuerpo tomo forma delante de Sulpicia - como medida protectora entre ella y la loba

Sonrei al ver la cara de la tonta loba, cuando de pronto Damon se puso enfrente de mi por lo que le mostre mis colmillos a la metamorfa-Eso es algo que tu no comprendes lobita ingenua y no creas que todos nos divertimos como ustedes usando el salvajismo que los reprecenta- sonrei al fin esto se hiba a poner interesante

Vaya, vaya, vaya... ¿qué tenemos aqui?- pregunte divertido caminando hacia la licantropa sin actitud agresiva - ¿Interrumpo la pelea de gatitas?

Pero si hay más invitados a la fiesta...- dije gruñendo -

¿Quién eres? ¿Otro Vulturi supongo? Ya basta de estupideces y de provocaciones.
No vuelvo a repetirlo...ni vosotras ni vuestra marioneta sois bienvenidos a nuestra zona, os informo que este no es territorio de caza....- amenacé de nuevo mientras la otra chica licántropo se iba situando en torno a ellos, dentro nuestro círculo de ataque -

Abrí los ojos frunciendo los labios y ladeando levemente la cabeza. No cese en el avance, continuaba avanzando hacia la loba.
Fijate, en mis ojos son grises. no soy un vulturi, y que yo sepa, no estamos haciendo nada malo. ¿Verdad Sulpicia?- me gire mirando a Sulpicia, dudaba de si ella me conocia, pero desde luego, yo la conocia a ella.

Jaja me rei por el comentario de Damon -Claro que no hacemos nada malo, el perro que tienes aqui enfrente piensa que el mundo es suyo solo que hay que aclararle un poco la mente y habrirle los ojos- me pare firmemente, esperando el momento en que la lobita se moviera, lastima que no estaban todos Vulturis, a nosotros nos encantaban estas distracciones -Vamos lobita, ya no te puedes controlar, es mejor que nos dejes pasar libremente la unica perjudicada serias tu

Se estaba acercando al límite que yo consideraba mínimo para entrar en fase y matarlo. Parecía que no tenía miedo alguno, y por un momento me causó gracia su atrevimiento.
Me alegro que no seas un Vulturi, pero desde luego estás de su lado, así que te aconsejo que dejes de tentar a la suerte...- dije observando atentamente su reacción -

Y debes de ser nuevo por estas tierras...quizás deberías preguntarle a Sulpicia si sabe a qué me refiero cuando digo que no deberíais entrar en nuestro territorio. Esto no es una diversión, estáis jugando con fuego...estáis rompiendo el Pacto y es causa de muerte segura - les grité tanteando cada pequeño gesto de las Vulturi -

Entonces vi cómo ella se acercaba todavía más y noté cada pequeño músculo de mi cuerpo tensándose y a punto de estallar.
Último aviso...- gruñi guturalmente -

Offpost: interesante rolear con vosotros malvados jajajajaja. Me tengo que ir a dormir, espero continuar mañana con vosotros.

Déjame que recuerde...-hice un gesto como de hacer memoria, llevandome el dedo indice a la sien y cerrando los ojos.

La tregua se acaba si alguno de nosotros muerde a un humano en estas tierras- dije abriendo los ojos y mirando a Leah - Yo salgo a merendar al patio de Seattle- añadí sonriendo con picardía