Buscando un poco de distraccion (libre)

Casi de forma temeraria me desplace hacia la posicion de Sam dispuesta a ayudarle como pudiese. Estaba segura de que David podria mentener a raya al vampiro

me pare justo detras de Damon, no hiba a dejar que lo lastimaran, eramos solo dos pero aun asi podriamos contra ellos, le mostre los colmillos a la perrita con la que se habia enfrentado Damon -Es mejor que te alejes niña- sonrei a Damon y tome una pocision de defensa, preparada para cualquier ataque

Vi cómo todos se habían posicionado, y esperé mi turno.
Sulpicia se movió a velocidad electrizante y se situó tras de Damon, mientras yo observaba con calma. Salté con mis patas sobre ella empujándolos a ambos contra David y Cyril. En milésimas de segundo desaparecieron de nuestra vista.

El juego ha empezado en serio chicos...los hemos cabreado de verdad. - dije telepáticamente a la manada -

Me giré levemente mirando sobre mi hombro a Sulpicia y le sonreí levemente, alcé una de mis manos cerrando el puño. La niebla que rodeaba a los dos vampiros iba aumentando su densidad, impidiendo ver a más de un metro de distancia.

Le indiqué a Sulpicia la posición de Cyril, indicándole que fuese a por ella. Estaba algo falto de carnaza, y usar mis habilidades me hacía consumir mi propia energía. Pero tendría la suficiente para pelear.

Me preparé para recibir con los brazos abiertos a Leah y a David, ya que Sam estaba incapacitada para pelear, y no tenía intención de matar a ninguno de ellos. Sólo buscaba marcar los límites y darles a entender que debían respetar a más vampiros, no sólo a los Cullen. Y que en cualquier momento, nosotros podríamos arremeter contra ellos y matar a cualquiera de su manada.

Alce la mirada hacia Leah cuando escuche su voz en mi mente, era la primera vez que me ocurria. ¿Se trataba de la telepatia de manada, de la que habia escuchado hablar?

Entonces intente comunicarme con toda la manada - ¿Hola, Hola? ¿Probando, probando?¿Hay alguien ahi?- permaneci distraida intentando escuchar algo en mi cabeza

-Escondete Ciryl- Le dije a Ciryl mirándola.

Apoye la pierna, dolía un poco, pero pude ponerle recta, mire a Sulpicia desafiandola, ahora Damon estaba en duelo con David y tenía vía libre para atacar, asi que empece a correr con algo de dificultad hacia ella.

Sitúe cada una de mis garras a cada lado de mi cuerpo y agaché la cabeza, dispuesta a saltar ante cualquier movimiento de Damon o Sulpicia. A mi lado estaba David, que también los vigilaba de cerca.

Observé cómo Sam caminaba con valentía y dificultad hacia Cyril e intentaba protegerla.
Escúchame Cyril, sí esto es la telepatía de los licántropos. Debes ayudar a Sam, ahora mismo está herida y no puede protegerte como desea. Debéis salir de aquí, los chupasangres intentarán bloquearos, pero eres fuerte y mírate también eres una licántropa en toda regla, así que lucha con uñas y dientes pequeña...- animé a Cyril convencida -

Después me dispuse a merodear en círculos a Damon, y a intentar cerrarle el paso a Sulpicia hacia Sam y Cyril. Pero sabía que tan pronto fuera a por uno de ellos, el otro me atacaría con toda su fiereza. Confiaba en ser capaz de resistir los golpes, y confiaba sobre todo en la destreza de David.

Bajé lentamente la mano abriendo el puño, haciendo desaparecer la niebla poco a poco, hasta que desapareció por completo. Debía ahorrar energía por si necesitaba transformarme en Cuervo. Por desgracia, la persuasión sólo me funcionaba con humanos.

Las indicaciones a Sulpicia estaban dadas, ahora sólo debía esperar a que ella empezase. Mi rostro estaba sereno y mi cuerpo relajado, aún estando en posición de ataque.

Miré a Leah y a David calculando posibilidades de ataque, intentando hacer una estrategia anticipándome a sus movimientos.

Off: Es privado?

No queria anticiparme, un movimiento en falso y podia poner en peligro a la manada.

"Escapad por la parte norte que la tienen desprotegida, nosotros os cubrimos, en cuanto llegueis al pueblo dad el aviso a los demás", indiqué mediante telepatia.

Continue analizando la posicion de los chupasangres, principalmente la de Damon ya que era mi contrincante.

OFF: Alice, no es privado. Participa si quieres

Sabía que el territorio en el que estaba, no era el permitido, sin embargo tomé aire, y seguí caminando...
Noté algunas miradas. Quedé perpleja.

Cuando la tensión podía cortarse en el aire, apareció como una visión Alice Cullen, paseando como siempre con su habitual ligereza. Permaneció estupefacta un momento, y nosotros asombrados.

Entonces decidí salir de fase para comunicarme verbalmente con ellos, corrí tras unos arbustos y me vestí con la poca ropa que había abandonado allí.
Pero vamos a ver…¿qué demonios está pasando? ¿esto es una fiesta de vampiros, os aburrís en casa y necesitáis acción o simplemente es que queréis comenzar una nueva guerra con nosotros? – pregunté atónita mientras vigilaba cualquier movimiento extraño de Damon y Sulpicia –

Alice…¿buscas setas o qué? – pregunté más enfurecida que nunca –

Aproveché la transformación de Leah en humana para correr con una asombrosa velocidad hacia ella, empujándola con fuerza contra un tronco para aturdirla.

No era lo que esperaba, porque mi intención era que Sulpicia empezase el ataque. Pero una ocasión como aquella no debía ser desaprovechada.

No preveí el ataque de Damon y caí con violencia contra un tronco. Un dolor seco me atravesó la espalda, y sentí un crujido. Me acababa de romper dos costillas, y ahora me costaría un esfuerzo sobrehumano entrar en fase. Me quedé allí quieta, expectante y mirando a Damon amenazadoramente.
Me recuperaría en cuestión de minutos, pero necesitaba tiempo. Así que me levanté agarrando mi torso, intentando recomponerme y limpiando la sangre que manaba de mi labio.

Uhm...buen tanto sanguijuela...¿querías verme sangrar? Pues mira y ríe, que esta será la última vez...si es que esto me pasa por ser educada con vosotros...- amenacé haciendo tiempo -

Sonreí caminando unos pasos a su alrededor y situándome de nuevo en posición, atacándola directamente al vientre con el puño. Debía ser rápido porque el otro licántropo podría atacarme en cualquier momento.

Salté sobre Damon con las fauces abiertas y las garras estiradas para desplazarlo de su posición y así repeler el ataque que tenía planeado contra Leah y así pudiese recuperarse antes y entrar en fase.

Retrocedí ante la embestida de David, apoyando una mano en el suelo para hacer más fricción y frenar antes.

Al fin y al cabo, estaba saliendo a la perfección. La loba herida y la cachorrita estaba desatendidas, perfectas para que Sulpicia acabase con ellas.

Vaya, el macho sale a la defensa de la hembra. ¡Qué caballeroso!-exclamé viendo el comportamiento del lobo.

Esta vez no me había pillado de improvisto, y pude desviar la fuerza del puñetazo. Lo miré de reojo y quise arrearle una patada en la espalda con toda la rabia que me quedaba. Pero en ese instante David saltó sobre él, evitando la pelea.

Tenía que entrar en fase en cuestión de minutos o acabaría por matarme.
Me desvié unos metros de la pelea, y esperé allí a tener la fuerza suficiente.

La hice un gesto con el hocico a Leah para que se dirigiese a la zona donde se encontraban Sam y Cyril. Con suerte se recuperaria a tiempo y se uniria al grupo contra la vampira.
Pelear no era algo que me gustase, siempre que podía lo evitaba. Enseñe los colmillos al vampiro, amenazandolo.

Me reí imitando el gesto del licántropo y haciando con la mano como si fuese una garra de un gatito - Brrrr.... Miauuuu - hicie imitando un gato ronroneando, y estallé en una sonora carcajada.

Mientras el vampiro me provocaba, un estallido de ira hizo que me avalanzase sobre él. Estaba fuera de mí. Tenía el blanco fijo y no iba a cambiarlo. Con la fuerza de mi embestida impacté contra él, cayendo los dos al suelo.

Sentí la fuerza del licántropo empujándome hacia el suelo, haciéndome caer bajo sus fauces. Con la mano me protegí, empujándole le hocico desde abajo para que no acercase su boca a mí y hacerme bastante daño. Por desgracia, la mordedura de un lobo, tardaba en sanar en el cuerpo de un vampiro.

Flexioné una pierna y clavé mi pie en el vientre del animal apartándolo de encima mí y levantándome ágilmente dispuesto al siguiente ataque.

Rodé por el suelo, pero tal cual cai me levante y ataqué de nuevo, lanzando mis garras sobre el pecho de Damon.

Observé cómo Damon agarraba sutilmente la herida que le había provocado David, y me di cuenta de que estaba distraído. Mis costillas comenzaban a soldarse de nuevo, y aunque sabía que era demasiado pronto para entrar en fase decidí que tenía que prestarle algún apoyo a David.

Me agazapé y salté con todas las fuerzas que me permitía mi complexión humana, y caí sobre su espalda, tapándole los ojos y desoriéntandolo. Me pareció un ataque muy infantil pero bastante efectivo para las limitadas posibilidades que tenía ante mí.
¿Dónde está el lobo Damon?...- pregunté sarcástica aferrándome a su cara -
Miré a David para que contratacara de nuevo.