Paseo nocturno

La miré tras su "reprimenda" y le reí. Al final Jane estaba mucho más tranquila y era ella misma, era muy agradable hablar con ella.

-Princesa...- mientras le abría la puerta y cerrandola cuando Jane subió a la furgoneta.

Asentí cuando abrió la puerta.

- Cochero... o chófer... o lo que sea - dije con toda tranquilidad sin poder aguantar una sonora carcajada.

Subí al coche, me senté y me puse el cinturón de seguridad esperando que Ryan subiese también.

Me senté en el asiento del conductor y mientras arrancaba la Chevrolet Combo le dijé -Que sea lo que Dios quiera, él decidirá cuantas vueltas tenemos que dar en Forks hasta encontrar su castillo princesa.- sonriendole.

- Espero que el castillo no se haya convertido tampoco en calabaza - dije divertida- Sino la princesa tendrá que dormir en un establo. - dije mientras miraba por la ventanilla cómo los edificios iban quedando atrás lentamente.

-No permitiria que durmieras en un establo.- le dijé divertido mientras conducía por la carretera en dirección a Forks.

- Nah... acabaría durmiendo entre cartones en cualquier porche. - dije como si no me importase. -

Además, cuando tengo sueño duermo en cualquier parte. - abrí el pequeño bolso de mano y examiné mi teléfono móvil, seguía sin llamadas pero con un mensaje. Lo leí. 'Vale cariño, ten cuidado. TQ. Mama'.

Suspiré y lo volví a guardar.

- Hacía tiempo que no lo pasaba tan bien.-dije girándome hacia Ryan.

-Yo también hacia mucho tiempo que no lo pasaba tan bien. Me alegra mucho haberte conocido. Y lo vuelvo a repetir, no permitiriá que durmieras entre cartones ni nada por el estilo.- le dije mientras le sonreia y le guiñaba el ojo.

- ¿Me invitarías al cutre motel del pueblo? No se yo que es peor... si los cartones o el motel. Bueno, no he estado dentro - me apresuré a decir- pero por fuera tiene una pinta francamente horrible.- dije encogiéndome de hombros.

Miré por la ventanilla. Estaba todo negro ahí fuera.

- O podemos ir a la comisaría a que el jefe Swan nos deje pasar la noche en los calabozos - dije moviendo las cejas rápidamente.

-Sé que no es el Ritz pero al menos tengo un techo para dormir.- le dijé cabizbajo

- Vaya, no te lo habrás tomado mal, ¿verdad? Lo siento... Creeme, si mi casa fuese tan grande como la de Delia y tuviese alguna habitación libre en casa te la dejaba, alquilaba o algo, pero mi casa es pequeñita - dije encogiéndome de hombros. - ¿No estarías mejor alquilando alguna habitación en una casa particular?¿Has mirado alguna casita en la reserva? Allí creo que son más baratas que en el pueblo.

-Llevo sólo un mes aquí y no me puedo permitir alquilarme una habitación por la reserva o lejos de Forks, a parte que ya lo he mirado y algunos alquileres son exagerados. Pero bueno, ahora voy a tener un trabajo por las tardes que me dará mucho más dinero y podré irme del motel- - contesté con esperanza.

- Ey, eso está muy bien - dije alegrándome por él- Pero no trabajes demasiado que es malo - dije guiñándole un ojo.

Volví a sacar el móvil y miré a Ryan.

- Ya está...- dije mientras tecleaba- Dime tu número, Ryan.

-654 69 00 69 hazme una llamada y grabaré tu número ¿vale?- le respondí y a la vez le pregunté -Me lo he pasado mejor este rato que he estado sólo contigo que en el restaurante.- le reconcí mientras tecleaba mi número en su teléfono.

Tecleé el número e hice una perdida hasta que sonó el tono del móvil de Ryan.

- Ya está. Ese es mi número.- dije mientras bloqueaba el teléfono.

Me encogí de hombros y suspiré.

- Bueno... sí... pero es que me cuesta soltarme, soy demasiado introvertida al principio y hasta que me suelto pasa un buen rato... - dije con una sonrisa.

-Enseguida que pare lo grabaré.- le dijé mientras me sonó el teléfono en el bolsillo trasero.

-Me alegro que estes mucho más tranquila. ¡Ah! ¿qué significa tu tatuaje? se me ha olvidado preguntartelo antes.- le dijé para que me hablará más sobre ella.

- La verdad es que no mucho. Me apetecía hacermelo, me pareció un diseño bonito, además de que las estrellas simbolizan buena suerte. - fruncí los labios- Espero que empiece a funcionar esa suerte un día de estos - dije con cara de circunstancias.

Nos estábamos acercando al pueblo.

- Ryan, ahora tienes que cruzar el pueblo hasta la carretera de La Push, como si fueses a casa de David, ¿sabes o te indico?- le pregunté amablemente.

-Más o menos si lo sé. Si ves que me equivocó me das un capon y me corriges ¿vale?- le respondí con una sonrisa en mis labios.

-¿Simbolizan buena suerte?- cogí un bolígrafo que habia por encima del salpicadero y me dibujé una en la mano -Haber si es verdad.- le dijé.

- No se yo... yo ya llevo éstas meses y nada de nada - dije encogiéndome de hombros. - Pero bueno, es pequeño, discreto y bastante mono. Algo con lo que puedo sobrevivir el resto de mis días. La verdad es que nunca me había planteado que es algo para toda la vida y que cuando seas un viejecito arrugado seguirás teniéndolo. No me lo había planteado hasta hace una semana. Es genial - dije soltando una carcajada. - Seré una vieja arrugada con un puñado de borrones que un día fueron estrellas.

Estabamos cerca de casa. De hecho sólo quedaba cruzar una larga avenida hasta llegar al borde de la carretera con La Push, que es donde se encontraba mi casa.

-Es muy bonito tu tatuaje, me gusta. Avisamé cuando empiecen a dar efecto que yo también me lo haré ¿Crees que me quedaria bien?- le pregunté mientras me señalaba mi nuca.

-¿Es por aquí verdad?- refiriendomé a la larga avenida por la que estaba circulando.

- Mmmm... - torcí el gesto pensativa- te quedaría demasiado gay. - añadí con sinceridad.

Solté una carcajada. Rápidamente moví los brazos.

- Para, para, es esta casa de ahí delante- dije señalando hacia mi casa sin parar de reir.

Reí ante su comentaria de como me quedaria el tatuaje. Cuando me dijo que parará me pasé de largo la vivienda que me decia, así que frené con suavidad y di marcha atrás hasta donde ella me indicó. Paré la furgoneta y me bajé para acompañarla hasta la puerta [/i]-Una casa muy bonita.-[i] le comenté.

- Una casa al fin y al cabo- le dije en un susurro.- Lo he pasado muy bien esta noche- dije con una sonrisa.

Abrí el pequeño bolso y saqué el llavero para abrir la puerta.

- Bueno... gracias por todo, Ryan. Nos vemos - dije apoyando mi mano sobre su hombro y dándole un beso en las mejillas. - Ya hablamos - dije a modo de despedida con una sonrisa pícara mientras entraba de puntillas a casa y me quitaba los zapatos para no hacer ruido. Me despedí con la mano y cerré la puerta lentamente evitando cualquier ruido.

-Un placer Jane, debemos quedar más a menudo.- le devolví los besos en las mejillas que ella me dió, entró en su casa y se quitó los zapatos para no hacer ruido y se despidió con la mano.

Me dirigí hacia la Chevrolet dispuesto a volver al motel al recordar que mañana ella tenia que estar con su madre al no poder ir a la playa con David y Delia. Paré un momento y me giré mirando la puerta de la casa por si casualidad se asomaba pero no fue así.

Arranqué la furgoneta y me pusé en camino mientras iba pensando en Jane.