Conociendo (Libre)

Me acerqué a Elena - Elena, estás en el lugar equivocado, por favor... márchate corriendo a casa, esa mujer es muy peligrosa- dije refiriéndome a Leah

¿Peligrosa?. - Dije algo confundida. - Se ve salvaje pero a eso que sea peligrosa no lo creo. - Dije con un hilo de vos. - Explícate por favor y me marcho. - Quería salir corriendo de aquel lugar, pero no podía tenia que saber que pasaba.

¿Yo peligrosa? -miré boquiabierta a Damon- Para ti seguro...y después de esto seré implacable...-gruñí mirándolo desafiante, haciendo un gesto hacia Jane, ya que era evidente que la había convertido-
Elena verás...Damon y yo nos llevamos bastante mal, tenemos unas diferencias abismales, y verdaderamente es muy peligroso estar por el medio cuando nos encontramos, créeme...-afirmé molesta con la humana por su insistencia-

- Creo que ya ha quedado bastante claro... - dije mirando a Elena intentando no resultar grosera.

Miré fijamente a Leah y sonreí levemente.

Si ya me quedo claro. - Dije en tono media molesta. - Vale me voy, arreglen sus asuntos. - Me di la vuelta.

Comence a caminar, y en eso cai en un hueco. - ¡Ah!. -Grite, mientras intentaba salir de aquel hoyo. - ¡Ayúdenme!.- ¡Genial! Elena eres una torpe pensé.

Fuí hasta Elena y la agarré de la mano sacándola del agujero, puse mis manos sobre su rostro para que me mirase a los ojos - Ey Elena, mírame pequeña- dije con un tono de voz amistosos y conciliador - No ha pasado nada en el bosque, vas a marcharte a casa, te darás una ducha y te relajarás haciendo cualquier cosa contidiana en casa. Olvidarás por completo todo lo que ha pasado aquí, sólo recordarás que nos encontramos tú y yo, que te acompañé hasta tu casa y nada más - dije utilizando mi poder sobre ella esperando su respuesta afirmativa.

Estaba algo aturdida en aquel agujero, cuando sentí que alguien toco mi mano y saco de aquel hoyo, era Damon quería articular alguna palabra de agradecimiento pero no pude por que puso sus manos frías sobre mi rostro y ahí entre en un trance y solo pude asentir hacia su orden.

Empecé a caminar, buscando el rumbo correcto a mi casa.

En eso sentí que algo en mi pierna. Me agache fijándome como mi sangre escurría por mi pantalón, ¡Genial! me había lastimado y ni cuenta me había dado pensé, me senté en un tronco para ver que profunda era mi herida.

Mi sonrisa se torció. Cerré los ojos y aspiré el aroma que me llamaba a gritos.

Abrí los ojos con un brillo especial. De mi garganta salió un gruñido a la vez que mis colmillos aparecían y corrí rauda hacia donde estaba la joven con la herida.

Todo ocurrió muy rápido, mientras permitía que Damon manipulara la mente de la humana para evitar que se viera inmiscuida en nuestra pelea segura, yo observaba cada movimiento de Jane y los del propio Damon. Seguidamente la humana se levantó y fue caminando lentamente por el camino.
Sin embargo hizo una parada fatal, observándose la herida de la pierna, y la neófita emprendió carrera hacia ella a una velocidad imposible.
Di un salto intentando bloquearla pero no pude alcanzarla, deshaciéndose de mí de forma sutil.
Miré a Damon, y después a la humana que permanecía impasible sin saber el peligro que se cernía sobre ella. Aunque entrara en fase no conseguiría salvarla, la descuartizaría con sus colmillos antes de que yo llegara hasta ella. Así que tan sólo vi una solución, muy a mi pesar y sin demasiada confianza.
¡¡¡Damon!!! DETÉNLAAAAAAAAAA...-grité mientras yo estallaba en fase con rapidez y me dirigía a bloquearla-

Observé a Jane salir hacia su presa, dispuesta a saciar su insaciable sed. Miré a Leah con tranquilidad sonriendo cuando entró en fase. Salí velozmente tras Jane y la detuve a tiempo poniéndome delante de ella y frenando en seco la sostuve contra mi cuerpo poniéndole mi brazo en sus labios provocando que ella me mordiese a mí - Pequeña, aún no... no aquí. Bebe de mí y calma un poco la sed - susurré acariciándole el pelo para calmarla. La notaba tremendamente excitada por la sangre de Elena. Por suerte, estábamos lo suficientemente lejos como para que la humana no se hubiese percatado de nada.

Miré a Leah y me quité la chaqueta lanzándosela - Leah, sal de fase. Tenemos que hablar.

Gruñí intentando deshacerme de Damon, sin poder evitar morder su brazo y beber su sangre, que me calmó levemente, aunque el olor de la sangre de la humana me atraía de manera extrema.

Cerré los ojos y bebí su sangre mientras me calmaba con sus caricias. La bestia que yacía en mi interior quería saltar hacia la joven sangrante, pero los dos dedos de frente que todavía me quedaban me impedía hacerlo.

Agaché levemente la cabeza apartándome y poniéndome la mano sobre la nariz, intentando cubrir mis fosas para evitar que la hedor a sangre entrase por ellas haciendo que el frenesí se apoderase de mi.

Miré silenciosa a Damon y a Leah. Estaba algo preocupada por mi comportamiento.

- Perdón... - susurré a Damon mientras le lamía la herida para cerrarla.

Me pareció realmente asquerosa la forma de alimentarse de Jane, tan dependiente y voraz, así que mi estómago me obligó a retirarme tras de unos árboles para salir de fase. Me puse la ropa que había dejado tirada, y respiré profundamente tras los matorrales con unas arcadas tremendas.
Después salí aún mareada, y le tiré la chaqueta a Damon. Ey...sólo la he necesitado una vez, suelo ser previsora, no me gusta oler a sanguijuela...-sonreí intentando recomponerme-

Después observé a Jane con aquellos ojos color rubí, tan pálida y malévola, todavía limpiando sus labios con la lengua. Me pareció una injusticia en toda regla que le hubiera arrebatado su vida, y mi ira comenzó a incrementarse, obviando por completo si la humana me escuchaba o no.
Maldito ¿qué le has echo?...sabía que me había equivocado por completo, me está bien empleado por bajar la guardia...-grité a Damon apretando los puños y respirando agitadamente-

Ey ey ey, yo no loa he obligado. Ella ha podido elegir, y no hice nada hasta que estuvo 100% segura. -me expliqué

Me puse delante de Damon. Entre la joven furiosa y él.

- No ha hecho nada que YO- dije remarcando la palabra- no le haya pedido. - dije parpadeando repetidas veces mientras ladeaba la cabeza observándola - ¿Y en qué te has equivocado por bajar la guardia? - pregunté curiosa con los ojos bien abiertos.

La miré alucinada. Aquella chica no tenía ni la más remota idea de lo que había echo.
Jane ¿Te parece normal entregar tu vida a cambio de convertirte en un monstruo que se sustenta de la sangre de los demás? Sé que Damon te ha manipulado de alguna manera para que seas suya, al igual que hace con todos los humanos...y aunque ahora te sientas fuerte, acabarás por arrepentirte...tal vez no sea ahora, ni mañana, ni dentro de cien años...pero un día te despertarás sin esperanza, convertida en una alimaña chupasangre sin alma, una criatura del infierno...-dije enfurecida por la impotencia-
¿Qué has echo Damon? Ahora tendré que poner todo mi empeño en matarte...aunque creo que será todo un placer para mí...-afirmé riendo de medio lado-

Después checarme la pierna, !Que Demonios! sigue caminando Elena pensé.

Seguí caminando, entre la maleza y los arbustos. De repente escuche algunos ruidos en lo profundo del bosque, era mas bien gritos.

Ves a ver Elena que tal si una persona necesita tu ayuda, pero que vas ayudar tu con la pierna toda ensangrentada, no en mucho pero en algo si pensé. Empece a caminar hacia donde esta aquellos gritos.

Los gritos se empezaron a intensificar, cuando llegue me escondí detrás de los arbustos y pude visualizar a un hombre y a dos mujeres.

En eso la chica que tenia aspecto algo descuidado que mataria al chico que demonios pasaba pensé, pero no salia de mi escondite.

OFF: ehm... Elena ¿mi poder qué? ¿Lo ignoras simplemente? Usé la persuasión para enviarte derechita a casa.

OFF: No lo ignore Damon, iba para mi casa pero cuando escuche los ruidos me dispose a regresar, crei que tu don actuaba y me dejaba seguir siendo yo despues. y Elena cuando escucha ruidos es una curiosa.

OFF: La persuasión es como una orden.

OFF: Vale comprendo. entonces me salgo del tema