Celebración del Día de la Bandera (In party time, welcome Forks Settlers!!)

Escuché la llamada de atención de Chris, mirando a Tanya y a todos los que la acompañaban con interés, mientras levantaba ligeramente la nariz. Todos vampiros...menos la niña pequeña, no sabría identificarla en esta forma, pero no es humana...-murmuré por lo bajo-
A continuación le di una colleja a Seth que parecía embobado mirando a su imprimada, y lo escruté con una ceja enarcada. Verás, como se te ocurra pasarte de la raya te vas a enterar...-susurré con la mano delante de la boca, haciéndole un gesto hacia mi Brad-
Os dejo sólos un par de minutos tortolitos...-murmuré mirando a la parejita y me separé acercándome a mi madre para comentarle que Brad era mi amor, y que tenía que hablarle de algo en concreto-

Después me dirigí hacia el lugar donde estaban Brad y Rachel colocando toda la parafernalia de nuestro picnic, con mi madre cogida del brazo tiernamente. Brad cariño, esta es mi madre Sue...es viuda y vive en la Reserva, aunque creo que eso ya te lo he contado...-dije intentando parecer tranquila- Mamá este es Brad Shinoda, su abuela vive en La Push y viene a pasar largas temporadas por aquí...él es mi...mi novio y mi imprimado...-susurré esto último por lo bajo- Ven, siéntate con nosotros para comer, y hablaremos de algo que queríamos comentarte mami....-dije invitándola a sentarse junto a Rachel y cogí a Brad de la mano, separándonos un poco con una sonrisa forzada-

Cielo, por favor, demos un paseo por la fiesta...-susurré tomándolo de la mano, ya que quería consultarle y planera la mejor forma de decirle a mi progenitora que nos íbamos a vivir juntos y a otro estado-

Caminábamos entre la gente cuando repentinamente nos tropezamos con una chica rubia espectacular, acompañada de un tremendo pestazo a vampiro. Hey, ¿quien eres tú? -pregunté poniéndome a la defensiva retrocediendo un par de metros hacia atrás, para proteger a mi amor sin llamar demasiado la atención-

Le sonreí de manera amistosa a Brad
- La verdad es que sí, mucho tiempo diría yo.- Me quedé pensando- las cosas van bien, pero podrían ir mejor-Me encogí de hombros y volví al lado del hombre que más amaba sobre la faz de la tierra.
Volví a mirar hacia Tanya, la podría reconocer en cualquier parte, estaba segura de ello antes de que Rachel y Leah me lo reconociesen.
- ¿Crees que sea igual que Nessie? - Le pregunté en el mismo tono que ella había usado para responderme.
Leah se llevó a Sue a conocer a Brad, seguro que se alegrará mucho por los dos. Suspiré y miré a Seth, pasando una mano por su cintura, observé como Sue se sentaba con Rachel y hablaban amigablemente.
Amaba pasar tiempo con Seth, él hacía que todos y cada uno de los minutos fuesen especiales.
Miré cómo Leah se alejaba un poco con Brad de la escena de donde estábamos,se veían tan felices, tan unidos.
- ¿Sabes? Me alegro muchísimo por tu hermana, se vé tan feliz, ya era hora de que lo fuese.

*atrapada en mis pensamientos como estaba, no me percaté de que una pareja se acercaba a mi y casi colisiono con la chica en mi descuidado deambular...ella evitó el roce advirtiendome con un sonoro "hey!" a lo que respondía frenando en seco levantando la cabeza de golpe, fijando mis ojos desmesuradamente abiertos sobre ella y arrugando la nariz mientras mi cerebro me gritaba "lobo, ¡lobo! ¡¡¡LOBOOOOO!!!". Miré al chico que la acompañaba, que tenía cara de no entender nada, era humano sin lugar a dudas a juzgar por su aspecto y su olor...
Como si una mano invisible me hubiese golpeado, reaccioné con una leve sacudida de cabeza y contesté intentando recomponer mi rostro, ya que no me gustaba andar arrugando el ceño, me parecía bastante ofensivo de mi parte, pero no podía evitar ciertos actos reflejo de mi cuerpo...*

-Ho...hola...disculpen, no quise....estaba... distraída...

*dejé la frase por la mitad haciendo señas con las manos indicando "no quise chocarme con ustedes"...Recumpuse mi voz y continué*

-...de cualquier forma, soy Verónica Depp...un gusto saludarlos...

*dije haciendo una pequeña reverencia con la cabeza de manera cortés a modo de saludo pues no estaba segura de querer tocarlos, ni de que ellos quisieran tocarme...no sabía hasta qué punto llegaba mi autocontrol, no quería tentar al destino.*

Gruñí ligeramente caminando hacia atrás, mientras me sorprendía con la amabilidad de aquella vampira, ya que al fin y al cabo su reacción había sido igual que la mía: fruncir el ceño.
Pero mi carácter me impedía ser amable con mis enemigos así que me limité a sacar pecho amenazadoramente, avisándola de que tuviera cuidado con lo que hacía.
Verónica, verás, para mí nunca es una opción a considerar el ser amistosa con los chupasangres...-murmuré con una expresión seria y poco afable en mi rostro-
Esta no es una zona de caza, así que como aparezca un sólo humano con una simple y minúscula mordedura en el cuello...abriremos veda contra vosotros y habrá algo más que palabras...-amenacé sin darme cuenta de si ella se había dado cuenta de mi condición, ya que por ratos parecía desconcertada de mi actitud extremadamente hostil y antipática-

Hay más como yo vigilando la fiesta, así que lo último que deberías hacer es jugar a desgustar y catar humanos...-aseguré apretando la mano de Brad con fuerza, aterrada al imaginarme que pudiera pasarle algo como aquello a mi único amor-
Por cierto soy Leah, recúerdalo...-murmuré mirándola con una media sonrisa desafiante, ya que mi instinto animal afloraba de forma arrolladora cuando estaba en presencia de algún vampiro-

Miré a Verónica sorprendida por su reacción desafiante, ya que al parecer también se había sentido amenazada por mis palabras. Fruncí el ceño cuando me dejó entrever que tenía demasiada impulsividad en mi actuar, e intenté mantener mi sentido común y mi escaso autoncontrol mientras ella hablaba moviéndose sinuosamente con cada gesto o expresión de su rostro.

Ella era extremadamente sensual, la típica mujer que se puede llevar a cualquier hombre sin proponérselo, robar corazones con un simple pestañeo, arrebatar suspiros con un movimiento de cabello, o dejar totalmente loco a cualquier ser con tan sólo besarlo.
Miré a Brad un par de segundos de reojo, y lo vi admirándola con interés únicamente masculino mientras ella también lo examinaba con una sonrisa sensual en sus labios voluptuosos y dejaba escapar palabras que cortaban como puñales en mi temeroso corazón.

Por un par de segundos sentí cómo la tristeza, los celos y el amargo sabor de la pérdida me arrasaban de nuevo desde algún rincón del pasado, demostrándome que seguían vivos y aguardaando en algún cajón secreto de mi subconsciente.
Sin embargo, enseguida un ardor interno, que se extendía desde mi esternón hasta la punta más alta de mi cabeza, me obligó a soltar el aire de golpe casi gruñendo, y sentí cómo poco a poco los ojos se me inyectaban en sangre, mis pupilas se dilataban constantemente, y aquella alarmante forma en la que podía escuchar el corazón palpitarme en las sienes. Era la señal de que estaba a punto de entrar en fase de la rabia.

Eres una vampira demasiado orgullosa y estúpida, no deberías mirar lo que nunca podrá ser tuyo...-murmuré mirándola amenazadoramente y soltando la mano de Brad de forma sutil, para acercarme a ella con el pecho bien erguido-

No sabes hasta qué punto doy recibimientos cálidos...extremadamente pasionales se podría decir...¿quieres que salgamos de esta fiesta y te demuestro lo buenísima anfitriona que soy? -pregunté con voz ronca mientras apretaba los puños intentando mantener los temblores a raya-

Aquella vampira había venido a despertar sentimientos aletargados en mi interior, así como mi instinto animal que intentaba aplacar poco a poco por el amor que sentía por Brad.
Asi que esperé su reacción, dispuesta a darlo todo de nuevo en lo que mejor sabía hacer: desgarrar y matar vampiros; aunque fuera más por causa de unos arrasadores celos que por la amenaza que suponía Verónica para los humanos de aquella fiesta.

Me recoste en el pasto mientras esperaba que mi pequeña Marie se cansara; estaba anocheciendo y muy pronto empezarian los juegos pirotecnicos; ya me imaginaba la cara de mi hija pequeña; mire hacia un lado y vi que ella venia en torpedo hacia mi...

Corri alegremente hacia mi mama; estaba fria y temble involuntariamente ella me paso encima una cobija y yo me recoste en su regazo mirando el cielo; vi que aun no irian a empezar y camine alejada de mi mama; llegue a un lugar donde habian dos bonitas chicas y un bonito chico - Hola, ¿ Por que tan bravos? - Dije mirandolos inocentemente

*mi picardía había hecho mella en el interior de Leah y me volví para escuchar de frente sus advertencias, sonreí como primera respuesta a cada una de ellas, pues me gustaba hacerme la atractiva de vez en cuando. Luego me tomé mi tiempo y respondí*

-¿quien te ha dicho que aspiraba a poseerlo?...Soy una persona muy observadora, pero eso no significa que desee todo lo que me llama la atención...he aquí la diferencia...

*me crucé de brazos mientras esperaba a que ella se aproximara.
La gente a nuestro alrededor comenzaba a observarnos cada vez con más interés, con miradas inquisidoras. Algunas madres llamaron a sus hijos que jugaban en las inmediaciones y los hicieron sentarse en sus respectivos manteles con gesto protector.*

-no te preocupes, no dudo de tus palabras y capacidades...No he venido aquí a arruinar la celebración, sólo quería dar un paseo, conocer gente nueva...y bueno, creo que he cumplido mi misión...

*Volví a sonreirle y descrucé mis brazos comenzando a voltearme para continuar mi camino...*

-...no sé porqué pero tengo el presentimiento de que volveremos a vernos, así que hasta pronto...

*dije y terminé de girarme mientras el viento que ahora me daba de frente a la cara hacía revolotear mi cabello en mi espalda*