Cocina y comedor

Pues me apetece...comerte a ti -pensé- no sé, quizá una ensalada que es lo más fácil de hacer ¿no? -sonreí-
No me mires así, no lo hago todo bien...de hecho soy un poco inútil en la cocina. -afirmé sonrojándome mientras abría su nevera y me maravillaba ante lo llena que estaba-

- Vale,pues entonces ensalada será- Me volví y cogí los cubiertos y demás para cortar los ingredientes.
-¿Que no lo haces todo bien? Pues a mi me parece que sí, que no se te de bien el cocinar es otra cosa- Le sonreí,Seth había abierto la nevera,así que aproveché para pedirle los ingredientes.
-¿Puedes sacar tomates,lechuga y demás,por favor? - Le pedí.

Por supuesto preciosa...-dije cogiendo en una brazada todo lo que me había pedido-
Después posé todo sobre la mesa y abracé a Christine por la cintura, besando su omóplato. Ella se revolvió intentando hacerse con los ingredientes, y yo la sujeté cogiendo los tomates y posándolos sobre la tabla que estaba frente a ella. Seguidamente cogió el cuchillo, y yo agarré suavemente su mano guiándola en el corte. Me gusta esto de cocinar...-ronroneé mientras seguía el movimiento de su mano-

Noté las manos de Seth en mi cintura y su aliento en mi cuello, intenté apartarle con delicadeza, pues cuando él estaba junto a mí no podía concentrarme en otra cosa que no fuese su cara, y seguramente acabaría por cortarme.
- A mi también, y sobretodo si es contigo- Sonreí para mí misma,mientras intentaba cortar bien,aunque fuera Seth el que me dirigía,por así decirlo.
-¿Cómo van las cosas en la manada?- Le pregunté,para sacar tema de conversación.

Con los lobos más o menos...hemos tenido ciertas diferencias con la primera manada, y ahora...bueno pues que somos autónomos Jacob, Leah y yo por ahora...no quiero agobiarte pequeña...-afirmé mientras me ponía a lavar nervioso la lechuga, tanto que acabé mojado con el chorro del agua del grifo-

-Mira como te has puesto- Dije, mientras me acercaba a el con una servilleta para secarle, pero seguramente no hiciese mucha falta, pues al estar tan caliente se secaba enseguida.-Ya verás como las cosas se pondrán mejor, solo hay que tener paciencia- Dije intentando animarle.

Chris tú no conoces a la manada de Sam...son todos, digamos que menos amistosos que nosotros...quitando a Leah por supuesto, que es la de más carácter...-bufé-

Prefiero no tener que encararme con ellos, que a mí no me gusta tener que enfrentarme a mis hermanos...-afirmé mientras me secaba los pantalones-

Suspiré-Hay que ver lo que te gusta pensar en negativo-Puse mis manos en sus mejillas y junté nuestras frentes, para que me mirase directamente-Antes de lo que pasó, todos erais una gran familia, como tú has dicho,erais como hermanos,y aunque sean menos amistosos,sentirán lo mismo que tu,y no creo que quieran enfrentarse.

Ya...-dije acariciando mi nariz con la suya- Me gustaría que todo el mundo fuese tan bueno como tú, pero en el mundo de los lobos...si traicionas a la manada te pegan un mordisco, y de los grandes...-aseguré frunciendo el ceño-
A mí me da igual, no te preocupes...sé defenderme, pero no me gustan los líos, soy un hombre de paz y amor...-bromeé levantando las manos espirituosamente-

Me preguntaba mentalmente si algún día se acabarían las diferencias entre especies y demás.No sabía qué contestarle así que me limité a darle un suave beso en los labios y alejarme un poco para seguir preparando la ensalada.
-Estoy un...poco preocupada- Comenté,mientras ponía los utensilios usados en el fregadero- Tanto tú como mi madre,y mis tíos y demás, vivís más de lo normal...y yo soy una simple humana, algún día algo nos separará, ya sea una enfermedad, o la vejez- susurré, desde que había llegado a Forks y había conocido a mi nueva familia, temía a la muerte más que a nada en este mundo,sería como una barrera entre Seth y yo y sería para siempre.No me atrevía a mirarle a los ojos, pues sabía que tendría una expresión un tanto debastadora en su adorable rosto,y eso solo empeoraría las cosas, pero tenía que decirle lo que sentía, era la única forma de volver a dormir tranquila durante las noches,y no sentir que no hay otra alternativa para mi vida.

Christine cariño…-susurré agarrándola de nuevo por la cintura y atrayéndola hacia mí-
¿Cómo puedes pensar en eso? Contra lo de los genes vampíricos de tu familia adoptiva no puedo hacer nada, ni contra su pestazo tampoco…-bromeé intentando animarla- Pero sí te puedo asegurar que un licántropo en cuanto deja de transformarse, envejece al mismo ritmo que un humano. Ni siquiera había pensado en envejecer sin ti a mi lado…imagínate, dos abuelillos sentados en una cabaña en el bosque, comiendo tarta de chocolate…-afirmé ensoñado, mientras observaba la cara de alucinada de Chris-
¿Qué…? ¿Qué pasa? Me gusta la tarta de chocolate, y me seguirá gustando cuando sea un carcamal…-bromeé-

No quería que mi pequeña le diera vueltas a esa tontería de la mortalidad, no ahora que todavía nos quedaban muchos años para disfrutar nuestro amor. Aunque todavía no sabía cuánto tiempo más tendría que ser licántropo y proteger a la tribu, ni siquiera quería preocuparme o pensarlo, no ahora que había encontrado la felicidad al lado de mi Christine.

No pude evitar reírme,con algunas lágrimas en los ojos- ¿Tan mal huelen? - Le pregunté,siguiéndole la broma.
- Pero no quiero que dejes de transformarte Seth, tampoco quiero morir,ni que mueras, ni que envejezcamos- Me limpié las lágrimas que bajaban por mis mejillas-Tengo miedo de cerrar los ojos y no volver a verte algún día.- Me acerqué más a él y le abracé fuertemente.
-No,claro que no pasa nada,a mi también me gusta la tarta de chocolate- Le sonreí débilmente.

La palabra morir seguía retumbando en mi mente,eso era algo que seguramente me seguiría preocupando todos los días de mi vida.

Cariño eso no pasará…me verás cada día de tu vida, y el día que no lo hagas no te preocupes…en unos minutos estaré contigo…o ¿acaso crees que te voy a dejar sóla? Yo no puedo vivir sin ti, eres la única razón por la que existo y cuando tú no estés en este mundo, pues te seguiré a donde vayas…no pienses más en eso, que no es un motivo para estar triste. Mírame ahora estoy aquí, y tú estás entre mis brazos, va todo bien…yo soy Seth y tú Christine, mi único y eterno amor…-susurré arrullándola entre mis brazos, ya que parecía aterrada-
De repente, una idea pasó fugazmente por mi mente, y un escalofrío me hizo estremecer súbitamente. Christine…¿no estarás pensando en hacer alguna tontería verdad? –pregunté recordando de quién era hija-

Asentí,sin ganas de seguir hablando de este tema,dejé que Seth me acogiese en sus brazos cálidos,y pronto fuí sintiendo la paz que anhelaba. Tal vez no todo estuviese perdido, no siempre las cosas tienen que terminar mal.
No le contesté directamente a su pregunta,si no que la dejé en el aire,y contesté con otra- ¿ Me seguirías queriendo si fuese vampira? -Susurré, siempre podía pedirle a alguien de mi familia que me transformase y así podría vivir siempre y por siempre junto a Seth.

De nuevo el súbito escalofrío recorrió mi cuerpo, como una corriente eléctrica abrasadora. Solté a Christine, y comencé a caminar de derecha a izquierda sin mirarla.
Por favor, dime que no consideras la opción de vampirizarte, dime que no quieres perder tu naturaleza humana, dime que no quieres ser vampira porque no sé lo qué haría…-afirmé moviendo aturulladamente los brazos-
No es una forma de vida cariño, no es la eternidad, ellos son demonios que matan gente por diversión…-dije calmando mi ira con un puñetazo sobre la mesa-
Chris me miraba atemorizada, y me arrepentí al momento de lo que acababa de hacer.
Perdóname cariño…es que no puedo ni creer que quieras vivir de esa forma….y a tu pregunta de que si te amaría…es evidente que sí lo haría, te amaría con locura igualmente…pero no sé cómo acabaría pequeña…-susurré totalmente derrumbado

Miraba a Seth sin poder decir ninguna palabra, mientras notaba como esto iba de mal en peor. No debería de haberle dicho eso... pensaba para mí.
- Seth,aunque creas que todos los vampiros son malos,no es así, mi familia no mata animales por gusto, ninguno de ellos quiso ser lo que son, solo Bella sabía desde un principio lo que quiso ser. ¿Crees que a Rosalie no le hubiera gustado ser humana y poder tener hijos propios? Pues claro que sí, al igual que Esme. Seguro que no es agradable tener siempre sed.- Suspiré.
- Al fin y al cabo, tienes razón, es una locura,no debería de habértelo dicho, además, me gusta ser humana, me gusta dormir contigo abrazados,me gusta tener frío,calor, y también quiero formar contigo una familia- Me senté en la silla más próxima que tenía.
- Y claro que viviría así ,pero lo haría por tí, la vida vampírica no es mi preferida...- Me tapé la cara con las manos- Yo también te amaría, con cada una de mis células, pues viva o muerta te amaré siempre.

Perdóname cariño...no digo que ellos eligieran esa vida, no quería ofenderte ni hacerte sentir mal...-susurré cayendo de rodillas y besando sus manos con ternura- Yo no quiero perderte de esa forma, no quiero ni que lo pienses por un segundo, no quiero que hagas una aberración como esa por mí, porque es lo último que desearía para ti...Chris cariño, la naturaleza es sabia, y la muerte es parte de la vida....deja de darle vueltas a eso. -dije suplicante-
Además, ¿Crees que a mí me gusta esta vida? No la he elegido, yo nunca quise ser un lobo creado para aniquilar vampiros...pero somos parte del bien, al igual que ellos pertenecen al lado de la oscuridad...
Por eso quiero dejar de ser licántropo lo antes que pueda, para poder dedicarme todo el tiempo a ti, a hacerte feliz, a tener nuestra familia...-sonreí sonrojado, dándole un pequeño beso-

-Tienes razón-Suspiré- Dejaré de pensar en este tema- Por el momento añadí en mi mente.Le sonreí, acaricié su rosto dulcemente mientras le escuchaba hablar, temía perder el hilo de la conversación, pues cada vez que miraba sus ojos me sumergía en un mundo subrealista y no podía pensar en nada, así que me levanté y me dirigí de nuevo a la encimera de la cocina.
-Sabes que lo que más quiero es estar contigo por siempre, pero quiero que sepas que no tienes por qué dejar de ser un lobo,a mi me gustas tal y como eres- Sonreí,saqué dos platos- La ensalada está lista,¿comemos?

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- No te preocupes por eso- Les sonreí.Abrí la puerta de casa y los invité a pasar, me dirigí hacia la cocina seguida de Jacob y Ness

-Mmm,vale.¿Qué desean comer los señores?-Cuestioné,divertida. Mientras me ponía con dificultad el delantal.- La chef está abierta a cualquier sugerencia-Dije con acento francés,el cual no me salía nada más.

Abracé a Nessie y la ella puso su espalda sobre mi pecho, sonrei como idiota al tenerla tan cerca, me sentia feliz.

- Sólo trae dos paquetes de galletitas y listo... los tres sabemos que no estas en condiciones ni de preparar un té- dije riendome

Bufé- Hubieras avisado antes- Me quité el delantal y lo tiré flojito hacia la cara de Jake para luego soltar una risotada. Me volví para coger las galletas.