Cocina del Loft

Bajamos las escaleras cogidos de la mano y entrando en la cocina. Erika y Lyzz debian o estar durmiendo aun, o ya habrian salido - Sientate, preparare un desayuno de campeones - sonrei sacando pan para tostar, chocolate para hacer chocolate a la taza, huevos, bacon, mantequilla, mermeladas varias...

Lo veía moverse embobada, casi danzaba por la cocina mientras sacaba los ingredientes de la nevera y los preparaba en boles y sartenes. Después el olor del desayuno se entremezcló con el suyo, y comencé a sentirme cada vez más voraz.
¿Sabes que podría acostumbrarme a que me hagas el desayuno todas las mañanas? -pregunté mientras me acercaba hasta los fogones, enroscando mis manos en torno a su cintura-

No me importaria para nada hacerte el desayuno, la comida, la cena cada dia- sonrei dando la vuelta al bacon en la sarten haciendolo volar con un habil movimiento de muñeca

Vaya pero qué maña tienes en la cocina...estoy gratamente sorprendida. Puedes hacerme de desayunar, comer o cenar siempre que quieras, incluso creo que ahora mismo mi estómago te haría un monumento...-sonreí sin soltarlo, admirando desde atrás su arte culinario-

¿Quieres que preparemos tortitas? Creo que hay sirope de caramelo y de fresa - dije girandome un poco y mirando a Leah por encima de mi hombro.

Eso nunca se lo propongas a una loba hambrienta...¡¡me encantan las tortitas!! -dije dando un saltito y poniendo cara de ilusión-

OFF: XDDDDD tortitas!!! uhmmm

¿Me ayudas? Necesitamos huevos, mantequilla, leche, harina y azucar-dije sonriendo y sacando el bacon de la sarten

Claro que te ayudo, si me lo pides así...-sonreí mordiendome el labio- Aunque te advierto que soy muy torpe en la cocina. -dije abriendo la nevera y cogiendo los ingredientes, mientras hacía malabarismos intentando que no se me cayeran-

Ven, vamos a mezclarlo todo aqui con el batidor - dije sacando un bol enorme de acero para mezclar las cosas, y sacando de un cajon la batidora

Vale mi capitán...-afirmé posando los ingredientes sobre la mesa-
Estaba tan concentrado que no pude evitar que se me escapara una risita. Después le acerqué los huevos, sobre los que comenzó a batir con paciencia. Después añadió el azúcar y la mantequilla, que le acerqué diligentemente.
Pero sentía unas ganas tremendas de abrazarlo, y se me ocurrió intentar jugar un poco. Así que metí la mano en el recipiente de la harina y embadurné su cara muy despacio con las dos manos, mientras él casi no se movía.
Ahora sí que eres un indio quileute de categoría....-afirmé a punto de estallar en risas-

Moje mi dedo en el sirope de caramelo y pinte los labios de Leah con el dedo indice y me acerque a ella sonriendo - Ahora si que tienes unos labios dulces

Ahhhh...¿cómo has osado endulzarme? -pregunté teatrera, limpiándome con la lengua el caramelo de los labios- Ahora exigo una satisfacción...-dije bromista mientras una manotada de harina cubría su cabeza-

Moje el dedo en el sirope de fresa y pinte con este los labios de Leah acercandome a ella y recorriendo el mismo recorrido que hizo el dedo, pero con la lengua - Todo lo que ensuciemos... habra que limpiarlo luego

El roce de su lengua sobre mis labios me produjo un intenso escalofrío de placer.
No me importa tener que limpiar si me tratas así...-sonreí sofocadamente mientras rodeaba su cuello con mis brazos y apretaba mi cuerpo contra el suyo-

El saber que Erika y Lyzz estaban en casa me cortaba mucho el rollo porque en ese momento hubiese agarrado a Leah del trasero y la hubiese echado encima de la barra de la cocina americana para besarla con mi cuerpo sobre el de ella. Pero debia contentarme con la imaginacion - ¿Quieres que desayunemos en mi habitación?

Jer se separó de mí intentando disimular su reacción apasionada, y volví a quedarme a dos palmos de narices de su boca. Tenía que controlarme o acabaría muy mal.
¿Desayuno en la habitación? Creo que estoy en el cielo...-dije suspirando, mientras colocaba el plato con las tortitas, cubiertos, platos y las tazas rebosantes de chocolate sobre una bandeja- ¿Sabes que puede ser que tu habitación acabe destrozada no? Dos lobos hambrientos, comida y pelea de almohadas...-sonreí mirándolo de reojo-

En ese caso, me alegro de haber hecho caso a Erika y no haber comprado almohadas de plumas. Así no habrá que limpiarlas.- dije riendo

Sonreí, le guiñé un ojo y cogí el desayuno camino a la habitación, con sumo cuidado y esperando que Jer me siguiera.

Cogi el resto de enseres para el desayuno y segui a Leah entrando en la habitacion y dejando las cosas sobre la cama medio deshecha - ¿Preparada para el atracon?

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OFF: responde ya en la habitacion